Disponer de una estrategia de innovación pasa por conocer las reglas del juego, elaborar un plan y adaptarlo según las circunstancias.
El mundo empresarial tiene muchas similitudes con el mundo deportivo. La competitividad, rivalidades, búsqueda del éxito, etc hacen que el mundo empresarial sea una competición diaria.
Para que el deporte y la empresa tenga sentido y compitan limpiamente es necesario tener una serie de reglas del juego. Si no entiendes las reglas del juego, no comprenderás la estrategia, no apreciarás el juego y sobre todo nunca conseguirás ganarte un puesto en el equipo.
Para los no iniciados, ver una carrera de ciclismo o un partido de fútbol, puede resultar aburrido, porque están viendo a personas andando en bici durante 200km o siguiendo a un balón durante 90 minutos.
Pero tanto el ciclismo como el fútbol disponen de unas reglas de juego, que los hacen mucho más complicados de lo que pudiera parecer a ojos del neófito. Las guías que explican los entresijos de cualquier deporte contienen cientos de páginas, de ahí que las estrategias para ganar un partido o una carrera sean la clave del éxito. En un mundo tan competitivo como el deportivo, cualquier pequeña diferencia puede ser la clave entre ganar o perder. Lo mismo ocurre en el mundo empresarial.
Igual que un entrenador debe conocer las normas del juego, para plantear la mejor estrategia y modificarla con el paso de la competición, una empresa también deberá conocer el mercado (terreno de juego), normas de funcionamiento y por supuesto disponer de una estrategia para que según discurra “la competición” adaptarla como corresponda, para alcanzar el éxito.
Los objetivos están para cumplirlos y los planes para cambiarlos, pero debería haber un plan inicial que nos sirva de punto de partida. (una estrategia empresarial para innovación)
Muchas empresas afrontan su día a día, sus aspiraciones de crecimiento y sus recursos de innovación sin un plan de juego adaptado a los tiempos actuales. Otras siguen planes de trabajo y estrategias de innovación que funcionaron en el pasado pero que no funcionan hoy.
De la misma manera que el deporte innova y se adapta a los avances, nuevos materiales, nueva tecnología, nuevos conocimientos, también la empresa debe evolucionar con el tiempo y con su entorno, mercado y competencia y desarrollar estrategias de innovación adaptadas a los nuevos tiempos.
Entonces, ¿Cómo innovar para adaptarme a los cambios en mi entorno? ¿Qué estrategia de innovación funciona mejor?, y sobre todo ¿es posible innovar más rápido, más barato y mejor?
Índice de contenidos
Existen tres claves
:
- Elige el terreno de juego.
- Desarrolla tu propio plan de innovación.
- Ejecútalo y adáptalo en un proceso Lean Startup.
Elige el terreno de juego
Esta fase tiene su parte positiva y su parte negativa. Aunque es bueno tener la capacidad de elegir donde jugar, en qué campo innovar, hacia donde abrir nuevas líneas de mercado, una sobresaturación de opciones puede dar lugar a que terminemos por no elegir ninguna, o el proceso de elección ralentice el de innovación, por una falta de toma de decisiones.
Una manera de empezar, es descartar hacia donde la empresa NO desea ir, qué sectores no quiere tocar. Por ejemplo, un periódico en su afán por innovar y aumentar sus ingresos puede haber sectores que no desea tocar aunque aumenten sus ingresos, como por ejemplo: anuncios de citas, juego o prostitución.
Cualquier dirección que acote las posibilidades será beneficiosa, para no perder tiempo en la elección del camino, si no en la construcción de innovación y nuevas líneas de negocio. Una buena manera de encontrar esos nichos es alejarse, aunque no demasiado, del core bussines de la compañía.
Para ello, hay tres maneras de aproximarse al problema:
- ¿Qué trabajos no pueden realizar actualmente nuestros clientes actuales?
- ¿Quiénes son los peores clientes de nuestro sector?
- ¿Dónde están las barreras que evitan el consumo de nuestros productos?
Respondiendo a estas preguntas podemos vislumbrar algunas respuestas que nos ayuden a enfocar hacia donde podemos derivar una nueva línea de negocio.
Suscríbete a mi newsletter y te regalo mi guía para crear un negocio online.
Desarrolla tu propio plan de innovación
Una de las claves a la hora de desarrollar tu propio plan de innovación es crear oportunidades específicas sobre las que actuar. Cuanto más concretas sean, más sencillo te resultará estudiar su alcance, su potencial, competidores y por supuesto analizar qué valor diferencial puedes aportar que te diferencie del resto.
Para ello, en otros artículos hemos visto la importancia de detectar tendencias que te ayuden a encontrar nuevas líneas de innovación. Una vez identificada una oportunidad es bueno disponer de un listado de preguntas y de puntos que debemos revisar para saber si la idea tiene sentido o bien emplear una matriz de valoración de idea frente a oportunidad.
Otro punto a tener en cuenta es: “fíjate en patrones antes que en los números”. Obviamente los números de un nuevo negocio son importantes, pero al inicio de un proyecto cuando la incertidumbre es muy alta, las estimaciones financieras tienen poco o ningún valor. Es mejor fijarse en el valor global del proyecto, qué valor aporta a cada uno de los clientes, o actores que están involucrados en el nuevo negocio y hacer una sencilla estimación del ROI (Retorno de la inversión).
La clave es elegir el proyecto a desarrollar por el valor que aporta más que por las previsiones financieras, que generalmente al principio son solo previsiones basadas en la imaginación y optimismo de quién las hace.
Ejecuta y adáptate
La clave que marca la diferencia entre un proyecto de éxito y otro que no lo logre, son la ejecución y el aprendizaje. Las empresas más innovadoras y que han alcanzado el éxito lo han conseguido porque han ideado, ejecutado y aprendido mucho más rápido que su competencia. Este ciclo se debe repetir tantas veces como sea necesario, y en cada ciclo debe haber un objetivo de aprendizaje. El que más aprende y lo hace en menos tiempo, es el que triunfa.
La capacidad de adaptación al entorno y al mercado es lo que permite que algunas empresas triunfen y otras no. Al igual que la naturaleza va evolucionando por selección natural, de la misma manera el mercado selecciona qué empresas siguen vivas y cuáles no.
Adaptarse al entorno es hoy más que nunca una necesidad para seguir adelante con nuestros proyectos, e innovar es la clave de esa adaptación.
Autor: Alfonso Prim (@Alfonso_Prim)
Si te ha gustado el post puedes dejar un comentario o seguir leyendo otros artículos relacionados.
- Las cinco claves sobre las que reflexionar para saber si eres emprendedor
- Cuatro pasos para captar tendencias de mercado que impulsen tu negocio.
- Cómo saber si tu idea de negocio va a funcionar. La herramienta definitiva.
Si deseas ponerte en contacto con nosotros o recibir información sobre nuestros talleres o asesoramiento, puedes hacerlo pinchando aquí o enviando una mail a contacto@innokabi.com
Ayúdanos a difundir el contenido de este post compartiéndolo en tus redes sociales. Puedes hacer clic en los enlaces siguientes. Muchas gracias.
👇👇 Comparto mis experiencias, cagadas, estrategias y aprendizajes de mis proyectos, para ayudarte a TÍ en los tuyos 👇👇
Suscríbete a mi newsletter y te regalo mi guía para crear un negocio online.
UNA COSA MÁS: Envío mails con frecuencia, explico experiencias reales que me pasan emprendiendo, que veo, que me gustan o que me disgustan con el objetivo de ayudarte a mejorar tu negocio (y el mío, porque también te intentaré vender mis cosas 😉 y donde te mostraré las mejores estrategias de marketing que he probado estos años.
Solo si estás en la lista... apuntarse es gratis y borrarse también (con un solo clic en cada uno de mis emails). Pero cuando entres, casi seguro que no quieres darte de baja... ;-).
Para cumplir con el RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) y entender que tus datos están seguros, debes leer y aceptar la política de privacidad. Tus datos serán guardados en Mailerlite, proveedor de email marketing. Mailerlite también cumple con el RGPD, así que todo está protegido y amparado por la ley.
